Republica Bolivariana de Venezuela
Ministerio del poder popular para la
Educación Universitaria
Instituto Universitario de Tecnología de
Maracaibo
Cátedra: Formación Socio Critica
Resumen
“Ley de ciencia y Tecnología en relación con el proyecto Socio Tecnológico.”
Integrantes:
Humberto Sánchez
María Virginia. Quero
Maracaibo,
julio 2012
Resumen
Ensayo
“Ley de ciencia y Tecnología en relación con el proyecto Socio
Tecnológico.”
La
ciencia y la tecnología han vivido a nivel mundial procesos históricos que
permiten no sólo estudiar sus progresos, logros, dificultades, sino también sus
limitantes y problemas. La ciencia y la tecnología constituyen factores
fundamentales de desarrollo de los países, pues desde tiempos remotos el
desarrollo de los pueblos se ha basado en el uso del conocimiento y, en
particular, desde la Revolución Industrial, la prosperidad alcanzada por las
sociedades se ha apoyado en importantes saltos tecnológicos, que ha
transformado el conocimiento.
En
Venezuela, específicamente, el progreso científico y tecnológico ha conseguido
un cierto nivel de desarrollo, que si bien no es el más deseable, tampoco ha
sido del todo negativo, pues, el resultado de este progreso se lo debemos, de
alguna manera al esfuerzo científico de las distintas organizaciones
propulsoras de la ciencia y la tecnología, orientadas según forma de ver las
cosas y de acuerdo a sus intereses y objetivos, pero que hoy día, requieren ser
revisadas y seguir las políticas de Estado fundamentada en la noción de la
demanda social, ajustada a las necesidades e intereses de la sociedad y a la
pluralidad de los distintos actores sociales. Dentro de este contexto es de
resaltar que la Misión Ciencia juega, hoy día, un papel importante, debido a
que está enfocada a promover, coordinar y asesorar al Ejecutivo Nacional en el
desarrollo y seguimiento de acciones, dirigidas a la utilización del
conocimiento científico tecnológico por parte de los actores sociales e
institucionales, motivando su incorporación y articulación a través de redes
económicas, sociales, académicas y políticas, que permitan la producción y el uso
intensivo y extensivo de ese conocimiento en función del desarrollo endógeno,
científico y tecnológico del país para mejorar las condiciones de vida de la
población y satisfacer sus necesidades.
Desde esta óptica, Venezuela está tratando de preparando y formando
ciudadanos que se apoderen del conocimiento, que privilegien la capacidad de
aprovechar localmente los conocimientos que se generan, tanto dentro, como
fuera de la región, para desarrollar su propia tecnología, tal es el caso del
convenio que se tiene con China y otros países, lo cual según Rico (s/f), es
“liberar el conocimiento”, lo que a Venezuela le permitirá ser soberana en el
plano tecnológico y así desarrollar su propio conocimiento, sin tener que pagar
regalías por la utilización de éste, contribuyendo de alguna manera, al
desarrollo y progreso del país. Se trata de poner la tecnología de la
información y comunicación al servicio social y no al servicio económico, donde
sólo algunos eran los beneficiarios; en este caso se trata del beneficio
colectivo de la sociedad. Por lo tanto, es notorio que nuestro país comenzó a
encaminar acciones hacia la cultura científico-tecnológica como elemento
importante para la nación, promoviendo y dando acceso a todas las
organizaciones públicas un software libre (Linux) para comenzar con esta ardua
labor; entonces, en vez de ser visto como un asunto vital e inseparable del
progreso nacional, debe ser visto como un paso adelante en el desarrollo
científico, tecnológico y social de país. Otro de los grandes logros
trascendentales para el país, ha sido el lanzamiento del satélite Simón Bolívar
conocido internacionalmente como Venesat-1, por nombrar algunos, construyéndose
así una sociedad con mayores oportunidades en el conocimiento, uso, adquisición
y desarrollo de la ciencia y tecnología. En este sentido, nuestro país, y a la
luz de los países latinoamericanos, está generando un cambio de cultura que ha
constituido para el Estado venezolano un gran desafío, transformando la
concepción y producción del conocimiento individualista, lineal, academicista,
a la visión de la producción colectiva, es decir con la incorporación de otros
actores sociales para la toma de decisiones; sobre todo cuando nuestro país
tiene como bandera la defensa de su soberanía nacional, y su proceso de
independencia política, económica, educativa, social e inclusive tecnológica,
para el desarrollo integral humano, la inclusión y bienestar social.